Siempre me he quejado de la política forestal de Asturias. Es triste ver un paraiso como éste invadido de Eucaliptos por casi todos sus rincones (exceptuando las zonas más occidentales que aún conservan su biodiversidad autóctona). Pero ya no es tanto en sí el hecho de la gran presencia de montes de eucaliptos sino la política de explotación que la industria maderera hace de este recurso. Entran a capón destrozando el entorno y sin ningún tipo de consideración hacia el terreno. Es triste ver como estaba el rio Arlós durante mi última excursión. Recuerdo cuando de niño me pasaba los fines de semana en casa de mi abuela y me bañaba en sus gélidas y cristalinas aguas como si de un rito iniciático se tratase. Sin duda el barrizal que enturbiaba las aguas aquel día será algo accidental y pasajero, pero no deja de ser un síntoma de como la brutal industralización hace por donde pasa lo mismo que el caballo de Atila. Alguna vez he pensado que lo que de verdad se oculta tras esta masiva introducción de este árbol australiano no son razones como su rápido crecimiento y aprovechamiento económico, o su utilidad como materia prima en la papelera de Navia, o su utilización como elemento estructural en la mampostación minera... no, en verdad es el principio de un plan mundial de invasión por parte de los koalas capitaneados por Mofli...
Lo que sí es cierto es que imágenes como éstas dan una lástima muy grande...
Por si acaso empezad a aplaudir Paolos...
Un abrazo muy grande y que tengais un feliz día sobre todo los del Barça... aaaarrrgggg... jejeje
Esa última foto ¿de que ye? ¿Ú ta?
ResponderEliminarVenía un poco al cuento, es una zona del valle de Vendón que habían talado hacía relativamente poco tiempo (supongo). La verdad es que me llamó la atención la forma que presentaban los montículos del terreno, pero a su vez la incluí en esta entrada porque me pareció que ilustraba lo que quería comentar. Pero lo cierto es que ese trozo aislado de bosque entre terrenos de aprovechamiento agrario (por lo que recuerdo) no era precisamente un bosque de eucaliptos... Indagaré pa saber que pasó exactamente.
ResponderEliminarYa he confirmado que los abultamientos del terreno fueron carriles hechos para extraer la madera. Además ese trozo de bosque constaba de castaños, carballos y pinos y he confirmado además que pertenece a unos primos de mi padre... Sin duda estoy pensando que es un terreno interesantísimo para ir con el detector. Máxime teniendo en cuenta la labor de removimiento del terreno que habrán hecho las másquinas y las raices de los árboles... creo que será mi próxima expedición...
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